La Tía Alia llama a su receta lenguado "Marly", un nombre que no he oído nunca, pero la receta habla de una preparación muy conocida: un pescado envuelto en pasta de freir, que no es otra que la clásica 'gabardina' o pasta Orly, como se llama en muchos libros de cocina. La pasta Orly se suele preparar con harina y cerveza o agua carbonatada, y le añade huevo, cuya clara se monta a punto de nieve. Queda un rebozado crujiente y uniforme, que encierra perfectamente el jugo de lo que envolvamos en ella, le va de cine al pescado y al marisco.
Me apeteció darle un toque diferente al adobo del pescado, así que cambié el limón por lima y añadí jengibre y guindilla fresca. El resultado fue fresco y sabroso.
1/2 kg de filetes de gallo, cortados en tiras
1 lima
1 guindilla fresca
1 cucharadita de cebolla en polvo
1 cucharadita de jengibre molido
Sal y pimienta
Ingredientes para la pasta de freir:
120 ml de cerveza
100 gr. de harina
1 huevo
Sal y pimienta
Salpimentamos el pescado y enrollamos las tiras, sujetándolas con un palillo. Exprimimos la lima y mezclamos el zumo con la guindilla picada, la cebolla y el jengibre. Colocamos el pescado en un bol y lo regamos con la preparación. Lo dejamos reposar en la nevera un mínimo de una hora, (mejor algo más), dándole la vuelta de vez en cuando.
Cuando vayamos a freir el pescado, preparamos la pasta Orly: mezclamos en un bol la harina con la cerveza, separamos la yema y la clara del huevo, añadimos y mezclamos la yema y montamos la clara a punto de nieve. Mezclamos suavemente con el contenido del bol, con movimientos envolventes, para que pierda el menor aire posible.
Sacamos el pescado del adobo y lo escurrimos unos minutos. Sumergimos cada pieza en la pasta Orly y freímos en aceite caliente hasta que tome color dorado. Escurrimos en papel absorbente y servimos inmediatamente.
La verdad es que quedaron unos bocados estupendos, con textura crujiente y abuñuelada muy jugositos por dentro. Nos encantó el toque de la lima con la guindilla y el jengibre, los serví con una salsita de tomate casera aromatizada con curry, y estaban deliciosos...
Ahora, toca esperar cuál será el blog encargado del reto el mes que viene y con qué recetas nos sorprenderá...
Me voy a apuntar tu rebozo, a mi no me gusta rebozar el pescado en exceso y en esta ocasión hice una fina pasta, pero esta tuya que dices que quedó como "abuñuelado" me la apunto, ya me imagino la consistencia en la boca y me relamo ;-)
ResponderEliminarBesos
Nieves
Muy ricos estos bocados de lenguado,ademas faciles de preparar.
ResponderEliminarYo hice el plato dulce,con algun cambio ,nos gustó en casa.besinos
Muy buena idea el adobo, tiene que aportar un sabor estupendo al lenguado
ResponderEliminarEs el segundo que veo con este aspecto parecido, si no igual, al mío. A mí me ha gustado mucho hacerlo de esta forma, además el adobo ha dejado un sabor estupendo al pescado.
ResponderEliminarUn besote,
Mar
Me ha gustado mucho tu presentación, muy original y con un aspecto increíble :)
ResponderEliminarUna presentación ideal, me ha encantado, yo también cocine esta receta, enhorabuena, sigue así, un beso.
ResponderEliminarLAS DELICIAS DE MAYTE
¡Qué apetitosos se ven! La presentación sin duda es fantástica ¡Besos mil!
ResponderEliminarhttp://losdulcessecretosdecuca.blogspot.com.es
Pues yo al rebozado no le he puesto huevo para ganar tiempo pero viendo tus fotos ya me arrepiento. Te quedó fantástico!!!
ResponderEliminarUn beso
BeatriZ
Nunca he hecho en casa este rebozado. Yo la verdad que cuando leí la receta no caí jajaja y yo le di la vuelta con el pan Panko jajaja. La apunto que la hago seguro. Un besote!
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